
La puerta de madera revestida representa dos estilos de mobiliario completamente opuestos. Por un lado -si se toma individualmente- tenemos el elemento marcadamente decorativo, que con sus tallas y molduras emerge como protagonista de la pared; por otro lado, la puerta invisible, que, en combinación con el revestimiento de madera de la misma factura, desaparece de la vista para lograr un efecto homogéneo.

Pespecialmente adecuada para espacios pequeños, la puerta de efecto invisible oculta eficazmente las habitaciones de la casa que no se quieren mostrar. La puerta de madera despegable puede revestirse de madera o de tejido, terciopelo o cuero, según las necesidades de personalización.